¿Qué sabemos sobre Castillo del Buonconsiglio?
El Castillo de Buonconsiglio es uno de los edificios más conocidos de Trento y uno de los principales conjuntos monumentales de Trentino-Alto Adige. Desde el siglo XIII hasta finales del siglo XVIII, la residencia de los príncipes obispos de Trento se compone de una serie de edificios de diferentes épocas, encerrados dentro de un recinto amurallado en una posición ligeramente elevada con respecto a la ciudad. Castelvecchio es el núcleo más antiguo, dominado por una poderosa torre cilíndrica; en el extremo sur del conjunto se encuentra la Torre Aquila, que alberga el famoso Ciclo de los Meses, uno de los ciclos pictóricos más notables sobre un tema profano de la Baja Edad Media italiana.
El Magno Palazzo es la ampliación del siglo XVI en forma de Renacimiento italiano, encargada por el Príncipe Obispo y Cardenal Bernardo Clesio (1485-1539); conserva en excelente estado un importante ciclo pictórico manierista. La Giunta Albertina barroca se remonta a finales del siglo XVII.
El castillo fue construido con funciones defensivas sobre un relieve rocoso, originalmente el sitio de un castrum romano.
La colina donde se construyó la fortaleza a partir del siglo XIII se llamaba Malconsey, nombre que todavía usaba en 1381 el obispo Alberto de Ortenburg. A partir del siglo XIV, el topónimo que en la antigüedad indicaba la pequeña colina dejó de usarse y se cambió el nombre original, adoptando un término más positivo: el castillo de Malconsey pasó a ser Buonconsilii (del Buonconsiglio).
Su estructura actual es el resultado de una agregación de edificios centenarios: de hecho, se distinguen claramente diferentes secciones y estructuras, que datan de diferentes siglos. El castillo de Buonconsiglio es uno de los complejos fortificados más grandes de los Alpes.
La parte más antigua es la de estilo románico, representada por el núcleo de Castelvecchio del siglo XIII (que luego fue reconstruido en 1440) y la gran torre circular (llamada Torre d'Augusto). En una etapa posterior, entre finales del siglo XIV y principios del siglo XV, la estructura fue profundamente modificada por los príncipes-obispos Jorge de Liechtenstein y Juan IV Hinderbach. El primero conectaba la torre de Aquila con el Castelvecchio, que pintó al fresco con el Ciclo de los meses, un extraordinario ejemplo del gótico internacional. Giovanni IV Hinderbach hizo construir las grandes almenas y la logia en estilo gótico-veneciano.
En 1500, el cardenal Bernardo Clesio, comprometido en un proyecto de reestructuración y remodelación urbana de toda la ciudad, hizo construir un edificio renacentista al sur del complejo, el Magno Palazzo, la nueva casa de los obispos, con frescos de Dosso Dossi y Girolamo. romano.
En el período barroco, el obispo Francesco Alberti Poia construyó la Giunta Albertiana, una estructura que permite la comunicación directa entre la sección medieval y el Magno Palazzo.
En 1796 la ciudad fue invadida por las tropas napoleónicas y el último Príncipe Obispo, Pietro Vigilio Thun, abandonó el castillo y se refugió en la fortaleza familiar de Val di Non. Con la secularización del Principado Episcopal de Trento y su anexión al condado de Tirol, el Buonconsiglio se redujo de una oficina de representación a un cuartel militar austríaco.
Antes del comienzo de la Gran Guerra, el castillo pasó a formar parte de la Fortaleza de Trento (Festung Trient). Durante la Primera Guerra Mundial, la sala del tribunal (la Stua della Famea del siglo XVI) fue la sede del juicio (1916) de los irredentistas Cesare Battisti, Fabio Filzi y Damiano Chiesa. Después de la sentencia, que sancionó la pena de muerte por alta traición, los tres irredentistas fueron conducidos a las celdas creadas en la logia. La sentencia se llevó a cabo en el prado entre el castillo y las murallas situadas al este (la Fossa dei Martiri): el 19 de mayo de 1916 fue fusilado el segundo teniente de Rovereto Damiano Chiesa, voluntario del ejército italiano; El teniente Battisti y el teniente Filzi fueron ahorcados el 12 de julio siguiente.
En 1918 el Estado italiano se convirtió en propietario del Castillo, que pasó a la Provincia Autónoma de Trento en 1974. El castillo es una mansión de honor de la Orden de Vittorio Veneto, apareciendo arriba a la izquierda en el diploma de Caballero.
Desde 1973 el castillo es la sede del museo regional de arte, también conocido como Museo Castello del Buonconsiglio. Aquí se exhiben numerosas colecciones de arte, que van desde pinturas hasta estufas de azulejos, así como colecciones arqueológicas y numismáticas. Entre los valiosos frescos barrocos y góticos se encuentra el llamado “Ciclo dei Mesi”, que pertenece a los frescos más preciosos del mundo.
Además de los preciosos frescos, el castillo alberga colecciones del Museo Nacional. Estos incluyen memoriales y escritos, música del siglo XV, un libro del Evangelio del siglo IX y un códice litúrgico gregoriano del siglo IX, así como esculturas, pinturas, frescos y dibujos carolingios.
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