¿Qué sabemos sobre Citania de Briteiros?
Citânia de Briteiros es uno de los sitios arqueológicos más importantes de Portugal, ubicado en la cima de la colina São Romão en la antigua parroquia de Salvador de Briteiros, Guimarães. Este asentamiento fortificado, conocido como castro, se remonta a la Edad del Hierro y sirve como un testimonio notable de la cultura castrista que una vez prosperó en el noroeste de la Península Ibérica. Designada Monumento Nacional en 1910, Citânia de Briteiros ha sido objeto de extensas investigaciones arqueológicas desde el siglo XIX, revelando detalles fascinantes sobre la vida de sus antiguos habitantes.
Historia y orígenes de la Citania de Briteiros
El cerro São Romão ha estado habitado desde el Neolítico o Calcolítico, pero el castro, tal como lo conocemos hoy, se desarrolló más tarde, alcanzando su apogeo entre los siglos II y I a.C. . Este asentamiento fortificado se extiende por 24 hectáreas, de las cuales 7 hectáreas son accesibles a los visitantes.La ubicación estratégica del castro, en lo alto de una colina a 336 metros sobre el nivel del mar, ofrecía una excelente visibilidad sobre el valle del río Ave, lo que lo hacía ideal para la defensa y al mismo tiempo proporcionaba fácil acceso a recursos naturales vitales, en particular el agua. Como otros castros de la región, Citânia de Briteiros estaba protegido por múltiples muros concéntricos, encerrando un núcleo central donde se ubicaban viviendas y áreas públicas.
La Organización Urbana del Castro
Uno de los aspectos más fascinantes de la Citania de Briteiros es su avanzada planificación urbanística para la época. Las excavaciones arqueológicas han descubierto una compleja red de calles que delimitaban claramente zonas públicas y privadas. La zona central, conocida como la acrópolis, albergaba edificios clave, incluidas estructuras residenciales, áreas públicas como la Casa del Consejo y dos baños.Las casas de baños, que probablemente servían tanto para fines higiénicos como rituales, se encuentran entre las estructuras más emblemáticas del castro. Uno de ellos contenía la famosa Pedra Formosa, una losa decorada que formaba parte del complejo balneario y está considerada como un ejemplo por excelencia de la arquitectura de la cultura castrista.
La mayoría de las viviendas eran circulares y estaban agrupadas alrededor de patios empedrados, rodeados por muros de piedra. Estos complejos residenciales a menudo incluían múltiples casas circulares, probablemente destinadas a diferentes ramas de la misma familia, lo que sugiere que Citânia de Briteiros era el hogar de grandes familias extensas. Además, se han identificado instalaciones de almacenamiento y edificios funcionales como talleres y establos, lo que indica una comunidad altamente organizada y autosuficiente.
Si bien Citânia de Briteiros comenzó a decaer tras la conquista romana en el siglo I a. C., ciertas áreas del castro permanecieron ocupadas hasta el siglo IV d. C. Los romanos introdujeron cambios significativos en el asentamiento, incluyendo nuevas técnicas constructivas, el uso de tejas y la reorganización del trazado urbano con un trazado de calles más ortogonal. A pesar de estas influencias, el castro conservó su identidad celta, como lo demuestran los numerosos hallazgos arqueológicos que conservan elementos de la cultura castrista.
Durante la ocupación romana, Citânia de Briteiros permaneció bien conectada con las principales rutas comerciales, lo que facilitaba el acceso a bienes como el vino, almacenados en grandes ánforas encontradas en el sitio. Sin embargo, la presión de la romanización y la reorganización del territorio finalmente llevaron al abandono del castro como asentamiento permanente en el siglo II d.C.
Excavaciones arqueológicas y la importancia del sitio
Aunque las ruinas de Citânia de Briteiros se conocían al menos desde el siglo XVI, las excavaciones arqueológicas formales no comenzaron hasta la década de 1870, bajo la dirección de Francisco Martins Sarmento. , pionero de la arqueología portuguesa. Las excavaciones continuaron a lo largo del siglo XX, con una nueva serie de estudios iniciados en 2004 por la Sociedad Martins Sarmento y la Universidad de Miño.Uno de los logros clave de estas excavaciones fue la reconstrucción de dos casas circulares, lo que brindó a los visitantes una comprensión más clara de cómo podría haber sido la vida en el castro. Además, los arqueólogos han descubierto cientos de estructuras residenciales y edificios públicos, lo que confirma que Citania de Briteiros fue uno de los castros más grandes y complejos de la región.
Cómo visitar Citânia de Briteiros
Citânia de Briteiros se encuentra a unos 15 kilómetros de la ciudad de Guimarães, en el norte de Portugal. Los visitantes pueden llegar fácilmente al yacimiento arqueológico a través de las carreteras EN 101 y EN 310, seguidas por carreteras locales que conducen a la parroquia de São Salvador de Briteiros. Un tramo de la Estrada Nacional 309 pasa cerca del sitio, brindando un cómodo acceso a los turistas.El sitio se puede explorar en unas pocas horas y, además de las ruinas arqueológicas, Citânia de Briteiros ofrece espectaculares vistas panorámicas del valle del río Ave y las montañas circundantes.
Además de su importancia arqueológica, Citania de Briteiros también cuenta con un rico entorno natural. Lo más destacado es un pino piñonero de 120 años, que fue declarado árbol de interés público en 2021. Esta combinación de patrimonio cultural y natural hace de Citânia de Briteiros un destino ideal tanto para los amantes de la historia como para los amantes de la naturaleza.